«Ayer te vi». Poema a Miguel
AYER TE VI
Ayer te vi./
Tus ojos me abrazaron desde lejos,/
reconociéndome./
Tu sonrisa, incrédula,/
me impulsó a pronunciar:/
“-¿Has olvidado mi cara?”./
“- Pues casi”, me dijiste./
Ayer te vi./
Eran los ojos del amor./
El día a día nos instala en la costumbre,/
nos aleja, con sus rutinas y sus límites, /
a pesar del roce diario./
De pronto, la distancia/
difumina tu presencia/
hasta hacerla más deseada./
Ayer te vi./
Tu cara era mi cara,/
miradas como espejo,/
sin parar de reírnos./
“¡Eres tú!, ¡eres tú!”,/
sin palabras decías./
Una tarde contigo insospechada,/
de historias de vikingos,/
de búsqueda de cuentos de dragones…/
Un mago de fuego poderoso/
abandonó su estante junto a un elfo/
para volar contigo./
Tus alas han crecido./
Imaginas sin límite/
y me pierdo entre “ Vikings”,/
Minecraft o el Diario de Gregg./
Ayer te vi/
y pronto, observaré tu vuelo./
Aprenderé a soltarte/
en cada despedida/
y me veré al mirarte/
en cada gesto inconfundible./
Ayer te vi… hijo/
y en tan solo unos días/
volverá el brillo sonriente/
de tus ojos buscándome./
Hoy tu ausencia, al despertar/
me susurró: /
“Ayer te ví”.